PANORAMA GREMIAL junto a los trabajadores .
Panorama Gremial dialogo con Miguel Roldan, Secretario General de la Asociación del Personal de la Universidad de Rosario en el marco de un nuevo aniversario por el día del trabajador/a No Docente celebrado el pasado 26 de noviembre.
«Gracias en nombre primero de la Comisión, de la institución, también de nuestra Federación que justamente surge ese día, histórico, hoy son 51 años exactos que se fundó la Federación.
Que nace de un desencuentro entre las 26 organizaciones de aquella época donde estaba la federación que se denominaba Auténtica que estaba comandada por el dirigente de APUBA, Antonio Martínez, un dirigente muy capacitado. Y claro, tenían acceso directo, una por la versión de la cercanía y otra porque APUBA fue siempre la universidad que concentró la mayor cantidad de no docentes del país. A esa versión de APUBA que era la que llevaba la voz cantante se habían sumado La Plata, Nordeste, estaba también Bahía Blanca que tenía un muy buen dirigente Gregorio » Goyo » Díaz que tuvo que emigrar del país porque fue perseguido y tuvo que ir a Palma de Mallorca, pero ese era un cerebro. Y de este otro lado estaba la FATUN del interior que siempre en los repartos quedábamos atrás porque no había este sistema de paritaria, era el gobierno militar. Bueno, así que este hombre sacaba siempre su mejor tajada y lo que quedaba era para el resto.
Y se empieza a gestar acá en Rosario con un compañero ya fallecido, Manuel Rogolino, junto con los compañeros de Cuyo, junto con Córdoba, que tenía un dirigente brillante que fue sinceramente, hay que decirlo, el cerebro de todo eso, un muchacho que era abogado, Manuel Posadas que fue uno de los redactores del primer estatuto de FATUN.
El Compañero del Litoral, también Ángel de los Reyes Secretario General de Santa Fe, también estaba Juan José Collazo de Resistencia, Sebastián Grosso de San Juan y Carlos Niveiro de Misiones., esas eran las reuniones con todos los compañeros del interior para crear la FATUN.
Y venían justamente con Carlos Orozco, que era el secretario general de la Universidad de Cuyo, diputado provincial, que había sido integrante de la CGT, tuvo una trayectoria muy buena.
Y acá en Rosario se hacían las reuniones. Y bueno, se luchó tanto, se luchó tanto, pero llega un momento en que venía ya, se había consolidado el regreso del general Perón al país. Y era de conciencia general, aún también en la FATUN auténtica, que primero, el dirigente no era peronista, pero era una gran persona y un gran dirigente. Y que si nosotros nos presentábamos con esa versión, sumado a que teníamos desencuentros en las universidades de los estudiantes, y eso en la CGT no se sabía.
No se sabía cómo venía, se sabía porque había todos los días desencuentros. Bueno, se habló de hacer la fusión y hubo conciencia total que había que hacerla porque de lo contrario íbamos a quedar muy marginados en la cuestión del sindicalismo argentino».
«A 51 años, realmente hoy es una versión total y absolutamente diferente a la situación que se vivía en aquellos tiempos donde la libertad era una realidad. Se había ido ya el gobierno de Agustín Lanusse y aún ya en el último gobierno de Lanusse hubo una apertura muy interesante. Pero hoy es un hecho inédito que lo ha tomado a todos por sorpresa es cierto, pero con una falta de llegar a entender lo cruel que es este gobierno porque aparte que va a salir con la de ellos de desmembrar en primer término todo el aparato estatal, porque la idea de esta gente es que ellos son los patrones y cuanto menos empleados tengan, menos dinero van a tener que gastar para sostener eso. Y entre eso estamos las universidades. Pero pasó algo que antes no pasaba.
Se conformó el Frente de Gremios Universitarios donde participan docentes, hay algunas divisiones pero coinciden ahí los rectores de todas las universidades, que eso es muy importante, y nosotros, que somos el gremio más homogéneo que no tiene ningún tipo de división. Y los estudiantes que participan también.
Los estudiantes están participando, están participando. Pero le voy a decir algo, hoy no es aquel estudiantado. Porque este estudiantado es tan brillante como cualquiera que en cualquier época fue a la universidad. Pero hoy sabe que lo han aplastado los métodos modernos de comunicación. Antes los chicos se tenían que juntar en los sótanos, en los bares, en cualquier lado para poder hablar. Y eso generaba una dependencia de obligación de no saltar los códigos. Lo mismo pasaba en el gremialismo.
Hoy está la cuestión remota. Uno de la CGT habla con uno de San Juan, el otro habla con otro de allá de la punta de la Patagonia. Hoy la realidad virtual pasa por las redes sociales, pero no deja de ser una realidad virtual.
Pero eso sabe que le han quitado al movimiento obrero también.
Yo he participado de esos movimientos. Usted tenía los contrarios suyos que no opinaban. Uno contrario, compañero, pero tenían opiniones diferentes. Lo tenía a 3 o 4 metros. El otro estaba sentado tal vez al lado suyo. Y eso eran debates profundísimos hasta las madrugadas. Terminaban los debates y se seguían en la vereda discutiendo. Hoy no se puede lograr una comunidad de ideas porque aquella persona que está lejos y usted no la tiene delante suyo le hace más caso a los gobernadores de su provincia que a los secretarios de la CGT».
Por último, Roldan expresó un mensaje para sus afiliados. «El mensaje es el mensaje eterno que le hemos dado a nuestros compañeros. La unidad por sobre todas las cuestiones. Se sabe que la universidad es un crisol de ideas políticas. Acá hay que tolerarse unos con otros porque este no es un gremio como es un gremio puede ser de la industria privada donde, hay que decirlo, donde el que no es peronista no es sindicalista. Acá hay de todos los partidos.
Y hay que tener cierta visión de todas estas cosas para que no se vaya ninguno del círculo. Del plato, como decía el general. Claro, que ha costado mucho armar esto. Y bueno, lo tenemos, pero no tenemos respuesta.
Y la gente esta que hoy gobierna la nación ha venido también advertida de algo que se lo sintetizo. Esta gente en la calle es peligrosa. Entonces ellos utilizan una sola forma de pararlo. El rigor de la represión.
Entonces, yo sinceramente, como muchos compañeros, nos sentimos satisfechos por la lucha en unidad.
Porque estamos todos juntos. Más unidos que nunca. Yo creo que acá hay que jugar con el desgaste de este gobierno. Este gobierno no va a soportar más. La gente no lo tolera más. Y le digo más, analice usted, que ya se están abriendo mucha gente de ellos también porque no coinciden. Los arrepentidos».
