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El Sindicalismo anunció unidad en contra del ajuste del gobierno de Milei

En un contexto de incretidumbre política y económica, la CGT y la CTA Autónoma han emitido comunicados en respuesta a las recientes medidas anunciadas por el Gobierno de Javier Milei.

CGT: «No Ajustan a la Casta, Ajustan al Pueblo»

La CGT, en un documento titulado «No es la casta, el ajuste lo paga el pueblo», expresó su preocupación ante lo que denominaron «medidas desordenadas de ajuste». Los dirigentes sindicales sostienen que las acciones del Gobierno generarán una fuerte aceleración del proceso inflacionario, afectando el poder adquisitivo de los salarios y jubilaciones.

La central sindical criticó la falta de un plan económico claro y convocó a una reunión de urgencia para analizar las medidas anunciadas por el ministro de Economía, Luis Caputo. Advierten sobre la posibilidad de una paralización de la actividad económica y la pérdida de cientos de miles de puestos de trabajo.

Héctor Daer, titular de la CGT, afirmó que acompañarán a los sectores perjudicados por las políticas del Gobierno, aunque aclaró que por el momento no se plantea la adopción de medidas de fuerza.

CTAA: «Construir la Más Amplia Unidad de la Clase Trabajadora»

Por su parte, la CTA Autonoma convocó de forma urgente a construir «la más amplia unidad de la clase trabajadora para resistir el ajuste de Javier Milei». Hugo Godoy, secretario general, denunció un falso diagnóstico del Gobierno que, según él, busca justificar medidas de extrema crudeza y brutalidad.

La CTAA declaró estado de deliberación permanente para construir una amplia unidad contra el ajuste oficial. Godoy destacó la necesidad de resistir las medidas que, según la CTAA, provocarán recesión e hiperinflación, afectando a los salarios, la industria y las economías regionales.

Ambas organizaciones sindicales coinciden en la importancia de la unidad del campo popular para resistir el ajuste y elaborar propuestas que concienticen y comprometan a la sociedad.

Estas reacciones sindicales evidencian el clima de tensión y preocupación en el ámbito laboral frente a las decisiones económicas del Gobierno, marcando un llamado a la resistencia y la búsqueda de alternativas que protejan los derechos de los trabajadores y la estabilidad económica del país.